Steve Jobs

Steve Jobs ha sido un referente para muchos de nosotros que comenzamos a estudiar informática allá por los años 80. Un referente que nos deja tras duros años de lucha contra el cáncer, sin dejar de trabajar más que lo que le fue necesario.

Cuando en los primeros 80, me enteraba de la aventura de Jobs y Wozniac en la realización de los primeros Apple, nos reíamos de la cultura de aquél “Silicon Valley” de los 80, y nos moríamos de ganas por poder llegar al MIT y hacer cosas interesantes.

Luego vinieron los años de lucha con IBM, con Microsoft, el “divorcio” de Jobs y Wozniac, hasta su regreso. Nada que no conozcamos.

Jobs quedó como un icono de alguien que sabía como debían ser las cosas. Un referente que impulsaba la usabilidad y el diseño del resto de la industria. Gracias a Jobs, muchos diseños de la ciencia ficción pasaron de las películas a las calles, los ordenadores adelgazaron y se hicieron elegantes, y se fundó la religión de Apple.

Sus fieles reniegan de elementos obvios: Apple vende productos caros con componentes que podrían reducir su precio en un tercio, de modo que mantenga su “exclusividad”. Es el enfoque contrario a Microsoft: “Un ordenador en cada casa”.

Retirado Gates y fallecido Jobs, acaba una época. Apple tendrá que demostrar que puede sobrevivir a Jobs, cosa que esta semana ya se nos empezó a parecer difícil. Reinventar una y otra vez el mismo modelo es algo que ya hace Microsoft, pero que no se le espera a Apple.

Steve Jobs, maniático de la usabilidad y del diseño, va a ser difícilmente reemplazable. Espero que alguien agarre esa antorcha para seguir forzando los avances tecnológicos que llevaron las tabletas de Star Treck a las calles de nuestras ciudades.

D.E.P.

Publicado por David Colomer

Cada día más curioso, cada día con más ganas.

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